Oaxaca: La Experiencia que No Olvidamos

Un viaje que transformó nuestra forma de ver y entender la identidad mexicana.

Oaxaca, tierra de culturas milenarias y tradiciones que han sobrevivido más de 4,000 años, se convirtió en un espacio de aprendizaje vivo para nuestros estudiantes. Entre colores intensos, sabores únicos y encuentros humanos que dejan huella, el estado nos abrió sus puertas y nos regaló un contexto extraordinario para fortalecer su crecimiento.

La aventura comenzó con la intención de aprender desde la experiencia. Muy pronto, cada calle, cada costumbre y cada historia compartida reveló la fuerza de la identidad oaxaqueña y su vínculo profundo con el pasado.

Mientras recorrían el Centro Histórico, los museos y los espacios culturales, los estudiantes descubrieron una ciudad que cuenta su historia a través de su arquitectura, su arte popular y su energía vibrante. El contacto con artesanos fue uno de los momentos más valiosos: ahí aprendieron sobre barro negro, alebrijes y tintes naturales, oficios que se preservan con pasión desde hace generaciones.

El viaje los llevó también al corazón del mezcal, siguiendo su elaboración desde el campo hasta el alambique. Probaron pulque, curados y otras bebidas tradicionales que no solo cuentan sabores, sino relatos y rituales que hablan de identidad. La gastronomía oaxaqueña terminó de completar la experiencia con su mezcla perfecta de historia, tradición y creatividad.

En Universidad Lux sabemos que las vivencias auténticas transforman. Por eso impulsamos experiencias que conectan a nuestros estudiantes con el mundo de manera humana, consciente y profunda. Este viaje es solo un ejemplo de cómo buscamos formar profesionales con visión, sensibilidad cultural y un deseo constante de aprender más allá del aula.